La Ceniza, su simbolismo

Al igual que vimos el significado del cilicio, el de la ceniza es muy similar, aunque esta más representa el dolor. La ceniza era una forma de mostrar luto y penitencia públicamente. La ceniza suele ir unida al polvo y al fango, indicando siempre una situación penosa y triste.

También se utilizaba como una figura o aplicación a la brevedad y limitación de la vida. La asociación del cilicio con la ceniza la encontramos en Mateo 11:21 y Lucas 10:13: Ay de ti, ¡Corazín! Ay de ti, ¡Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, hace tiempo que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.

La ceniza también se utilizó como un término simbólico, que representa la vanidad del hombre, según Isaías 44.20: Se alimentan de cenizas, se dejan engañar por su iluso corazón, no pueden salvarse a sí mismos, ni decir:¡Lo que tengo en mi diestra es una mentira!

La inmundicia: Job 30:19: Me arroja con fuerza en el fango, y me reduce a polvo y ceniza.

La desgracia: Salmos 102:9: Las cenizas son todo mi alimento; mis lágrimas se mezclan con mi bebida.

La vergüenza: 2 Samuel 13: 18-19 Así que el criado la echó de la casa, y luego cerró bien la puerta. Tamar llevaba puesta una túnica especial de mangas largas, pues así se vestían las princesas solteras. Al salir, se echó ceniza en la cabeza, se rasgó la túnica y, llevándose las manos a la cabeza, se fue por el camino llorando a gritos.

Humillación ante Dios: Génesis 18:27: Abraham le dijo: Reconozco que he sido muy atrevido al dirigirme a mi Señor, yo, que apenas soy polvo y ceniza.

Arrepentimiento: Daniel 9:3: Entonces me puse a orar y a dirigir mis súplicas al Señor mi Dios. Además de orar, ayuné y me vestí de luto y me senté sobre cenizas.

Derramar ceniza sobre la cabeza era una señal de luto, de tristeza o de arrepentimiento (2Sa_13:19; Isa_58:5; Isa_61:3; Jer_6:26; Lam_3:16; Eze_27:30; Job_2:8; Mat_11:21). El dolor se manifiesta también con la expresión estar sentado sobre ceniza, y un hombre abatido y humillado por sus enemigos es un hombre de ceniza (Job_30:19; Job_42:6).

Las cenizas se usaban en la purificación ritual de los inmundos Números 19:9, 10: 17; Hebreos 9:13.

Por último, diremos que en el hebreo la palabra desûen, se traduce como “cenizas” con referencia a la mezcla de la grosura de los sacrificios y el combustible utilizado para consumirlos. También se usa este término para hacer referencia a los cadáveres incinerados.

En el griego, la palabra spodos, se emplea en el Nuevo Testamento para las cenizas empleadas en casos de luto o de purificación, Hebreos 9:13: La sangre de machos cabríos y de toros, y las cenizas de una novilla rociadas sobre personas impuras, las santifican de modo que quedan limpias por fuera.


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